Han pasado más de diez años desde aquella noche de noviembre en Moscú, donde la venezolana Gabriela Isler fue coronada Miss Universo 2013. Sin embargo, las dudas resurgieron esta semana luego de que Osmel Sousa, exdirector de Miss Venezuela y figura clave en la industria de concursos, revelara que la corona habría sido un “obsequio” gestionado entre bastidores.