Eran las 18:10 de un domingo reciente. Una pareja caminaba por una acera de Urdesa norte cuando de manera sorpresiva un vehículo negro sin placas se estacionó junto a ellos. Inmediatamente, el chofer y un pasajero, que estaban cubiertos con gorras, se bajaron para amedrentarlos con armas y llevarse sus pertenencias. Fueron quince segundos de terror.