Los automóviles y productos farmacéuticos europeos estarán sujetos a un arancel del 15% al entrar en Estados Unidos, según un comunicado conjunto publicado el jueves por la Unión Europea y la administración Trump, que no incluye reducciones para vinos y licores.

“Desafortunadamente, no pudimos incluir este sector” en las reducciones declaró el comisario europeo Maros Sefcovic en una conferencia de prensa, en la que presentó los detalles del acuerdo comercial alcanzado entre la UE y la administración Trump a finales de julio.

Añadió que las conversaciones continuarán y que “estas puertas no están cerradas para siempre”.

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Esta reducción de los aranceles aduaneros al 15% para vinos y licores fue muy solicitada por Francia e Italia.

Tras meses de intensas negociaciones, Bruselas y Washington sellaron un acuerdo comercial a finales de julio basado en aranceles aduaneros del 15% para los productos europeos que llegan a Estados Unidos.

Esta tasa es mucho mayor que la vigente antes del regreso del presidente estadounidense al poder, alrededor del 4,8%. Pero menor que la que el multimillonario republicano amenazó con imponer al Viejo Continente en caso de no acuerdo.

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En cuanto al calendario de aplicación de estos aranceles aduaneros del 15% para los automóviles, en comparación con el 27,5% actual, el comisario europeo expresó su confianza en que se aplicarían retroactivamente al 1 de agosto, afirmando haber recibido garantías de los estadounidenses en ese sentido.

El texto conjunto precisa que el arancel de 15 % entrará en vigor cuando la UE introduzca un texto legislativo para reducir sus propios aranceles.

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“Estamos trabajando con determinación para iniciar el proceso legislativo” lo antes posible, enfatizó Maros Sefcovic.

En un breve mensaje publicado en X, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, celebró un texto que ofrece “previsibilidad para nuestras empresas y consumidores”.

Además de los aranceles impuestos a los productos europeos, la UE se comprometió a invertir 750.000 millones de dólares en energía y 600.000 millones de dólares en inversiones adicionales en Estados Unidos. (I)