La reforma a la Constitución Política de Nicaragua, que transforma el Estado, elimina el balance de poderes y otorga un poder total al presidente del país, Daniel Ortega, y a su esposa, Rosario Murillo, quienes ahora tienen el cargo de copresidentes, persigue la “sucesión familiar”, sostuvo el Centro de Estudios Transdisciplinarios de Centroamérica (Cetcam) en un análisis presentado este viernes en Costa Rica.