Carlos Daniel Acosta Cedeño, de 26 años, e Iván José Girón Mosquera, alias Vicente, de 28, fueron asesinados dentro de la celda n.° 13 del pabellón E de máxima seguridad en el Centro de Rehabilitación Social de Loja.
La principal hipótesis que manejan las autoridades, según un extracto policial, es que ambos internos, presuntamente integrantes del grupo delictivo Los Lobos, habrían intentado tomar el control del pabellón, desatando una violenta represalia por parte de sus compañeros.
El hecho ocurrió la tarde de este jueves, 17 de julio.
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Las muertes se descubrieron cuando el personal penitenciario acudió a entregar los alimentos, notando la ausencia de las dos PPL. Tras una revisión rápida, encontraron los cuerpos suspendidos con sogas atadas a las literas, con claras señales de asfixia mecánica.
Personal de Criminalística confirmó que los cuerpos presentaban surcos completos y laceraciones en el cuello.
Se hallaron restos de tela como posibles elementos utilizados en el estrangulamiento. Las víctimas fueron trasladadas al centro forense de Loja para los procedimientos legales correspondientes.
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La alerta inicial fue reportada por otros internos, quienes señalaron a los presuntos responsables del doble crimen.
Según la versión de uno de los agentes penitenciarios, los mismos sospechosos, Freddy C., de nacionalidad venezolana, y Carlos A., se habrían autoincriminado diciendo que tomaron la decisión de eliminar a las víctimas “porque no estaban de acuerdo con que ellos se tomaran el mando del pabellón”.
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Ambos reclusos contaban con antecedentes penales. Acosta había sido procesado por robo y figuraba como integrante del grupo Los Lobos, mientras que Girón Mosquera tenía antecedentes por asesinato. Las autoridades sospechan que buscaban instaurar una nueva jerarquía dentro del pabellón E.
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Aunque Castellano y Agurto fueron señalados en el sitio del crimen y admitieron su participación, el fiscal del caso explicó que aún no existen pruebas sólidas para una vinculación formal. El proceso se mantiene en etapa de investigación.
Las primeras pesquisas apuntan a que los ahora occisos habrían intentado imponerse como nuevos líderes del pabellón, algo que habría incomodado a otros privados de libertad, generando el brutal desenlace. (I)
