El presidente de la República, Daniel Noboa, aspira a que los ecuatorianos aprueben su propuesta de instalar una asamblea constituyente que escriba una nueva constitución y derogar la actual, que se aprobó en Montecristi en 2008. Argumenta, entre otras razones, que tiene un alto número de derechos ciudadanos, incluso para las personas privadas de libertad (PPL).